Páginas

30 ago 2016

I Wanna Go (Britney Spears, 2011)



Ayer fueron los MTV VMA 2016, que nos interesan regular pero que nos permiten dar salida a uno de esos post envasados al vacio que tenemos en la nevera. Porque practicamente todo el mundo (todo el mundo que no tiene nada mejor que hacer... como nuestro equipo de redacción) está hablando hoy de Britney y su desastrosa performance [1], que evoca las sombras del lejano 2007 cuando acabó tocando fondo como no se ha visto. Una historia fascinante, el mismo Sr. Forfy apostó que no salía de esa... y vaya si salió la moza. 9 años después, con su carrera resucitada de entre los  muertos y con la cabeza más o menos en su sitio parecía que el retorno a esa Atalaya de la Cultura Popular iba a traducirse en un ajuste de cuentas mayúsculo... pero no. Aquí en Mundo Alocado nos solidarizamos mucho con la gente que lo intenta (lo que sea).

Y no es que tengamos especial apego a la Diva pero admiramos su resiliencia, por lo que ahora mismo, mientras medio internet vuelve a señalarla con el dedo y que si playback por aquí y por allá, sacamos a la palestra uno de sus momentos álgidos. Con I Wanna Go, del que posiblemente sea el albúm más redondo que ha sacado: Femme Fatale [2], la Spears se marcó un tema machacón, adictivo, puro pop-chicle del que terminas tarareando (o silvando) a todas horas. No obstante mejor que la sobre-producida canción es ese videoclip que mezcla con brío unos cuantos ingredientes que nos resultan irresistibles: metalenguaje + autoconsciencia + derribo absoluto. Nunca estuvo tan icónica, tan descarada ni tan divertida como en ese momento. Mención especial para los estrenos de la cartelera y ese top camiseta que se apropia de cierto mensaje con bastante más acierto, mala baba (y derecho) que otros.




[1] Intentar cerrar agujeros de gusano temporales desde este 2016 tan cargado de odio y bilis tuitera no puede funcionar bien. El gran pecado de la actuación de este año es que es sosa como ella sola, algo previsible cuando tienes un tema tan anodino como Make Me (Me, Myself & I funciona algo mejor). Vale que no ha sido el mejor dia de Britney y que tiene que practicar un poco más con el Singstar pero esto no es ese espectáculo zombie/oda a los estupefacientes que nos ofreció en 2007. Leave Britney alone! 

[2] La canción que nos ocupa y, sobre todo, ese díptico pre-y-post apocalíptico que se marcó con Hold Against Me y Till The World Ends son lo más interesante que hemos encontrado en toda su carrera. Nos gustan bastante, para que negarlo. Es una pena que, a nuestro parecer, desde ese Femme Fatale no haya vuelto a hacer nada ni medio parecido.

2 comentarios :

estrella dijo...

Tampoco ha estado tan mal la actuación de este año... Como dices, sosa. Me he acordado de este artículo de Garance Doré en el que también hablaba de los retornos de Britney. La verdad es que la chica no se da por vencida y admiro mucho eso.

I Wanna Go me gusta regular... Creo que es mucho mejor Till The Worl Ends. El videoclip está gracioso pero me resulta un poco forzado, no sé.

Sr. Forfy dijo...

¡El artículo es muy bueno! ¡Muchas gracias!

A mí me gusta mucho más Till the World Ends (video y canción) pero esta me parece que tiene mucha más chicha en cuanto a derribo de la cuarta pared, autorreferencias y demás (cosas muy Mundo Alocado, vaya).

Abrazos,
Al